Cómo disfrutar del columpio sexual
Cada vez más hombres y mujeres se animan a probar esta divertida y diferente práctica sexual, la de contar con un elemento externo que nos ayude a encontrar posturas y...
Para disfrutar plenamente de las relaciones sexuales y sacarles siempre el máximo partido a cada situación es muy importante conocernos a nosotras mismas, de este modo siempre sabremos cuáles son nuestros puntos fuertes y qué es aquello que nos hace vibrar de una manera más intensa.
Una exploración que puede ser llevada a cabo por nosotras mismas o por un gigoló profesional que las conozca todas y cada una, si es que no queremos realizar este viaje en solitario y preferimos hacerlo en una perfecta cita romántica, en cualquiera de los dos casos es siempre muy importante tener una predisposición y una mente totalmente abierta a nueva información de manera que podamos descubrir todos nuestros secretos. Vamos a contarte algunos de ellos y cuáles son estas zonas tan sensibles que hacen vibrar a todas las mujeres.
En primer lugar hay que dejar claro que estas zonas erógenas que pueden dar tanto placer no se limitan a la vagina o al clítoris, sino que hay muchas otras zonas que no tienen que ver con los genitales y que pueden provocar tanto o más placer al ser estimuladas. Una sensación que podrás disfrutar en una cita romántica con un auténtico hombre prostituto que sabrá tirar de todas tus cuerdas para mantenerte en una excitación constante.
Estimular todas estas zonas tan distintas es un arte que no todo el mundo conoce ya que es necesaria una información previa o algún tipo de experiencia como la que sólo los profesionales y los amantes del sexo poseen. Pero si estás leyendo esto es probable que estés un paso más cerca del autoconocimiento y el placer más auténtico reservado para unas pocas afortunadas.
Nos encontramos con que las zonas más erógenas de la mujer se encuentran en todo el cuerpo, y no sólo en los genitales y aunque en principio estas zonas son comunes a todas las mujeres también es cierto que dependiendo de cada persona el grado de satisfacción obtenido al estimular una u otra zona puede variar enormemente, para esto es fundamental mantener una comunicación sexual activa para que ambos amantes podáis estar a gusto en todo momento y disfrutéis del placer del otro.
Además es muy importante a la hora de recibir estimulación sexual que encontremos un estado mental y de concentración que nos permita disfrutar de forma efectiva de la experiencia que estamos a punto de vivir. El hecho de encarar las relaciones sexuales con algún tipo de preocupación, estrés o problemática puede conseguir que no obtengamos el placer esperado al estimular nuestra zona favorita o dejar a nuestro amante que lo haga. No olvidéis dejar de lado las preocupaciones y volcaros en vuestro propio cuerpo antes de empezar a disfrutar de vuestras zonas erógenas para encontrar el placer.
Existen una gran cantidad de zonas erógenas en el cuerpo femenino, y existe además una manera de clasificarlas atendiendo a lo estrechamente relacionadas que están con la obtención del orgasmo, de manera que sea mucho más fácil encontrarlas y conocer de una forma teórica el placer potencial que se puede obtener al estimularlas.
En primer lugar existen las zonas erógenas potenciales, que aunque no generan un placer relacionado directamente con el orgasmo sí que pueden estimular de una manera indirecta la vagina y provocar su humedad y excitación, preparándonos para una relación sexual por todo lo alto. Estas zonas erógenas se encuentran por todo el cuerpo y varían ligeramente dependiendo de cada mujer, como pista os diremos que las orejas, el cuello o los pies son probablemente las más conocidas de estas zonas erógenas potenciales que deberéis conocer para poder aprovechar el magnífico efecto que tendrán en vosotras. Seguid buscándolas si todavía no las habéis encontrado.
Zonas erógenas secundarias
Estas zonas toman una parte más activa en la relación sexual y provocan la excitación directa de nuestras zonas sexuales (es decir, los genitales). Lugares tan excitantes para la mujer como los pezones, el pubis, las nalgas, el perineo, el ano o los labios vaginales. Estimular estas zonas de la forma adecuada puede provocar mucho placer y que nos encontremos totalmente excitadas cuando pasemos a las siguientes zonas.
Zonas erógenas primarias
Son aquellas con las que, a través de la estimulación, podemos alcanzar directamente el orgasmo, y por supuesto aquellas a las que queremos llegar en cuanto comience nuestra relación sexual. Pero también es importante hacerlo con paciencia y dedicación, estimulando antes las zonas secudarias y las zonas erógenas potenciales para que nuestro grado de deseo sea mucho más elevado.
Estas zonas primarias son otras que la vagina y el clítoris, que estimulados de la manera correcta, en muchos casos gracias a la penetración provocan auténticas oleadas de placer incontrolable.
Un placer que a partir de ahora vas a poder controlar a tu antojo para conseguir de tus relaciones sexuales exactamente aquello que estás esperando, una sensación, la de disfrutar de una experiencia sexual que podrás compartir con un auténtico experto sexual como lo es un gigoló profesional, un perfecto caballero que además conocerá todas estas zonas como la palma de su mano para brindarte las experiencias más increíbles que hayas podido disfrutar.
Foto vía: ourspacebetween
Gif vía: italianlady2
Gran articulo! Muy buen contenido, didáctico e imprescindible si se quiere aprender, como yo, sobre educación sexual. Ánimo con el blog, saludos cordiales!